“La cultura no decora la política, sino que la constituye”

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Con el objetivo de visibilizar la lucha de las mujeres referentes de espacios barriales, el Centro Cultural Kirchner inauguró el miércoles 29 de marzo El revelar de las ollas: cocineras comunitarias, exhibición realizada por La Garganta Poderosa.

En una tarde que reunió a los artistas participantes de la muestra, a referentes de la revista cooperativa y a las propias cocineras, estas últimas fueron las protagonistas. “Ya nos quitaron la tierra y el sol, nuestra riqueza y la identidad”: con estas palabras, la voz de Nahir, militante de La Poderosa, irrumpió en la sala al ritmo del bombo e inauguró el encuentro. La exposición, curada por Flora de la Vega, reúne fotografía, muralismo, cerámica y hasta un video documental, que manifiesta la necesidad urgente de reconocimiento salarial para las mujeres de los barrios que sostienen espacios alimentarios todos los días. Sobre una pared pintada y dibujada por el artista Emanuel Amado Vega, el ministro de Cultura de la Nación, Tristán Bauer, el subsecretario de Gestión de Espacios y Proyectos Especiales, Martín Bonavetti, la directora de Planificación y Programación del Centro Cultural Kirchner, Liliana Piñeiro, y los referentes de la Garganta Poderosa Susana Zaccaro Nacho Levy compartieron sus palabras con el público.

“La cultura no decora la política. Tampoco la edulcora, sino que la constituye”, afirmó Levy, luego de recordar el lugar indispensable que ocupó para la lucha popular Ramona Medina, vocera de la Garganta Poderosa de la Villa 31 fallecida por Covid en mayo de 2020 en plena pandemia. El militante destacó la semilla de cultura popular que implica que la exposición ocupe una sala entera del Centro Cultural Kirchner y agradeció a las autoridades por darle este espacio a “una organización que incomoda”, que evidencia lo que no se quiere ver y que da cuenta del rol de las trabajadoras comunitarias en la constitución de la cultura y de la democracia. “¡Cuando el arte no incomode, sospechá!”, concluyó, y le pasó la palabra a Susana Zaccaro, otra referente de la cooperativa. La activista cordobesa aclaró que la lucha no comienza ni termina hoy, sino que se podrá concluir cuando se sancione la ley de reconocimiento salarial para las cocineras. Por otro lado, destacó que “hay muchas cocineras que no salen en las fotos, pero que abren las puertas de sus casas para dar de comer”. En la actualidad hay más de cinco mil comedores en los que trabajan setenta mil mujeres, alimentando a todos los que lo necesitan. “Estamos bien fuertes y bien paradas. No vamos a detenernos hasta que este derecho sea adquirido”, afirmó.

Tristán Bauer agradeció enfáticamente el trabajo comunitario de las cocineras y resaltó el ejemplo que representan para nuestra sociedad. “En el arte, las luchas de los pueblos tienen un rol central”, planteó. Las escenas que despiertan las fotografías tienen un fuerte poder convocante y despiertan una gran sensibilidad en el espectador. Las mujeres que sostienen merenderos y comedores, representan el desarrollo de la cultura, “una cultura basada en la solidaridad en la que todos deberíamos trabajar”, continuó. El ministro destacó el lugar indispensable que ocupa lo comunitario en la cultura, entendida no como un gesto individual, sino como un espacio compartido, y remarcó su compromiso con expandir la exposición por todo el país. “Esta muestra es un comienzo, un tomarnos de la mano y empezar a andar”, concluyó.

A continuación, se acercaron los fotógrafos de La Garganta Poderosa, que recorren los barrios para retratar la labor de las cocineras, y compartieron con el público su experiencia y su emoción por poder ser parte de esta lucha a través del arte. Paloma Cerna subrayó la importancia de difundir el proyecto, compartirlo y hacerlo masivo, pero aclaró que “lo que hacemos no le hace justicia al laburo que desarrollan las cocineras en los barrios”; Rodrigo Caballero resaltó que la exposición pone en primer plano “una realidad que es importante mostrar, para disputar el sentido común”. Tras las palabras de los fotógrafos, la sala se colmó de aplausos y de abrazos y recibió a La Ferni, quien musicalizó el final del encuentro con la potencia de su voz.


El revelar de las ollas: cocineras comunitarias puede visitarse de miércoles a domingos, de 14 a 20 h, en la sala s101 (primer subsuelo).